MUSTAFARIANOS
A pesar de las extremas
condiciones del planeta, Mustafar ha dado lugar a una gran variedad de formas
de vida. Algunas incluso se han vuelto racionales. A los mustafarianos les
importan poco los intereses de los extranjeros en su planeta. Sólo se ocupan de
recolectar los minerales que fluyen por los ríos de lava de su planeta.
Hay dos subespecies entre los
mustafarianos. Unos, los altos y delgados, son los que montan las pulgas de lava sobre la costra de los ríos de lava.
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UNIVERSO EXPANDIDO
Evolucionados a partir de
artrópodos extremófilos con muy poco agua en su organismo, los mustafarianos residen
en los frescos huecos de los volcanes dormidos. Sus exoesqueletos
quitinosos están apoyados en placas sobre su piel parecida al cuero, lo cual
les protege del intenso calor que deben sufrir día tras día en Mustafar.
Los mustafarianos
del norte (los más altos) son físicamente más débiles. Por ello suelen cubrir
sus miembros con prótesis mecánicas para incrementar su fuerza, velocidad y
resistencia.
Los mustafarianos
del sur son más bajos, pero son más fuertes y duros. Trabajan en cooperación
con sus primos realizando los trabajos más pesados o que requieren mayor poder
físico. Pueden suportar mayores temperaturas que los mustafarianos del norte y
por ello pasan más tiempo en la superficie que sus compatriotas vistiendo
armaduras y máscaras respiratorias que los protegen del intenso calor.
Algunos también viven
y trabajan en edificios con forma de platillo cerca de las entradas de las
minas. Las estructuras son construidas para extenderse varios niveles bajo el
suelo y suelen utilizar como emplazamientos antiguas minas que ya no producen
mineral.
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Se aventuran a ir a la superficie siguiendo
caminos trazados por las pulgas de lava. En el pasado, reciclando los
caparazones desechados de las pulgas en armaduras, las distintas colonias de
mustafarianos tomaron contacto entre sí al poderse desplazar a la superficie.
Construyeron una especie de naves ciudad dedicadas al comercio pacífico, que se
ubicaban en la superficie del inhóspito planeta.
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Cuando la Tecno Unión llegó al
planeta, los mustafarianos firmaron un tratado con los extranjeros. Este
comercio galáctico dio a los mustafarianos una avanzada tecnología que les
ayudó a resistir los duros peligros de su planeta.
Los mustafarianos hablan un
zumbante lenguaje insectoide. Son muy fuertes. No les lastima el armamento
láser estándar, ya que su piel y armaduras pueden soportar el calor que
irradian la mayoría de los blasters. Y aunque no son una especie agresiva han desarrollado armamento para
protegerse, un tipo de bláster nativo que
emite rayos de energía cinética.
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