HORAX Los horax son unos enormes reptiles nativos del planeta Nelvaan. Un horax totalmente desarrollado mide más de 15 metros de alto. Son unos cuadrúpedos robustos con una piel gruesa y nudosa. El reptil carnívoro tiene una boca llena de afilados  dientes,  pero  ninguno  es  tan

impresionante como los cuatro enormes colmillos afilados como sables que sobresalen de las mandíbulas del monstruo. El horax tiene unos cuernos en forma de paleadora al final  de su hocico que utiliza para desarraigar árboles y abrir madrigueras para comerse a colonias enteras que están hibernando. Las colas de los horax son largas, pesadas y llenas de afilados espolones y rematadas en una maza de hueso denso. Gracias a los ciudadanos de Nelvaan, los horax son raros, una especie agonizante a la que no le sientan nada bien los cambios climáticos a los que está sujeto el planeta. Debido a su gran tamaño y su naturaleza territorial, sólo se puede encontrar un único horax en una gran zona del planeta y su talla hace que sea fácil detectarlos cuando se acercan. Los nativos nelvaanianos de la aldea Rokrull descubrieron que un horax puede ser repelido con un elixir hecho a base de las escamas de la criatura. Una escama puede producir suficiente cantidad de la acre mixtura como para pintar un perímetro alrededor de la aldea que dura todo un año nelvaaniano. Este anillo protector se ha convertido en un elemento muy importante en la cultura tribal de los nelvaanianos. Cada año los jóvenes varones nelvaanianos son enviados para encontrar un horax dormido y arrancarle una escama. Ese era el rito del paso  que garantizaba a ese nelvaaniano el acceso a los rangos superiores de los guerreros exploradores de la aldea.